Transformar una idea en un negocio que funciona es la filosofía que subyace a todo negocio innovador que, además de tener un toque novedoso, debe responder a las necesidades y demandas de los potenciales clientes.

Un mundo tan cambiante como el actual, en el que las innovaciones tecnológicas se suceden sin descanso, es un terreno abonado para gestar nuevas ideas de negocio. La crisis también ayuda a agudizar el ingenio. Pero la innovación no se refiere sólo al negocio de Internet o de la telefonía móvil: se trata de dar una vuelta de tuerca a las soluciones de negocio ya existentes para adaptarlas a los nuevos tiempos.

Negocios innovadoresLas necesidades siguen siendo las mismas que Maslow formulara en su obra Una teoría sobre la motivación humana, allá por 1943. Una vez que se han cubierto las necesidades básicas, de seguridad, de afecto y de reconocimiento, pasamos a una esfera superior donde tienen cabida otro tipo de apetencias. En cualquiera de estos campos podemos encontrar un modelo de negocio innovador, que sea capaz de sorprender gratamente al cliente, que resuelva sus demandas y que resulte, al mismo tiempo, rentable.

Algunas empresas, como Blackpier, han adaptado el viejo negocio de la sastrería a las necesidades de hoy, ofreciendo un servicio a distancia donde el cliente puede personalizar su propio traje a partir de un modelo básico añadiéndole extras.

Otras tiendas, como La Costurera o La Retoucherie de Manuela, ofrecen lo que las madres de antaño y las abuelas hacían en casa: pequeños arreglos de ropa que te pueden sacar de un apuro.

Algo parecido sucede con las compras colectivas, que hace unas décadas estaban restringidas al ámbito familiar en el mejor de los casos, y que han experimentado un gran auge debido a las facilidades que presta Internet. Algunas empresas, como Groupon, han sabido ver la oportunidad de negocio y se han posicionado como números uno en las compras colectivas online.

En algunos casos, la idea es, pues, reformular viejos negocios y adaptarlos a la vida de hoy, y obtener así negocios con futuro. Pero, en otros, la innovación se refiere tanto al concepto de negocio como a la necesidad que se cubre.

Future Health es un banco de células madre que conserva la sangre del cordón umbilical para que pueda utilizarse en casos de necesidades médicas muy concretas. Sin los avances que se han sucedido en la medicina en los últimos tiempos, no hubiera podido concebirse algo así.

Tampoco hubiera tenido mucho sentido inventar nPower PEG hace unos años, cuando la población no era tan dependiente de los dispositivos móviles. Este cargador de baterías funciona gracias a la energía cinética y es capaz de recargar móviles, reproductores de MP3 y MP4 y tablets con el movimiento corporal.

El reciclaje, las energías limpias y el cuidado del medio ambiente también son caldo de cultivo para crear negocios innovadores y rentables: zapatos y bolsos fabricados a partir de neumáticos reciclados son la punta del iceberg de un sector negocio en crecimiento constante. La lavadora que lava con un 90% menos de agua ya es una realidad gracias a Xeros Cleaning.

Un negocio innovador debe tener gancho para atrapar al cliente, adaptarse a los nuevos tiempos y ser muy flexible para poder hacer frente a cualquier eventualidad. Una buena idea puede encontrarse en cualquier parte. Sólo hay que saber verlas.